La primera referencia histórica del microscopio compuesto aparece en una carta de 1595 escrita por William Borel, enviado holandés a la corte de Francia. En dicha carta, Borel acredita a los fabricantes de lentes Hans Jansen y su hijo Zacarías, como inventores de un instrumento que consistía en dos lentes combinadas en un tubo en el que la magnificación variaba mediante la alteración de la distancia entre ellas. Se conseguían unos 9 aumentos. Sin embargo el instrumento como tal no tenía nombre propio y no se conoce ninguna publicación de observaciones científicas realizadas con dicho artilugio.
El nombre "microscopio" se lo debemos a Giovanni Faber, que a pesar de su nombre era alemán. Era un botánico y miembro de la Accademia dei Lincei. En 1609 Galileo desarrolló un microscopio compuesto al que denominó ochiollino que quiere decir "pequeño ojo". Sin embargo el invento no fue presentado en sociedad hasta 1624 pues se requirieron muchas mejoras para obtener una imagen clara de lo que se observaba. Los aumentos conseguidos fueron unos 30. Un año después, Faber utilizó por primera vez el nombre de "microscopio" para referirse al instrumento de Galileo, como una forma de complementar el recién acuñado término: "telescopio".
El primer trabajo científico de microscopia es el trabajo de Giambattista Odierna titulado "L'occhio della mosca" y publicado en 1644. Sin embargo el más famoso de esa época es la obra Micrographia escrito en 1655 por Robert Hooke. El microscopio de Hooke puede ser considerado como el primer microscopio moderno con su soporte, tornillo de enfoque, una fuente de luz y tres lentes ópticas. La descripción ilustrada del aparato aparecía en el prefacio del libro.
Link relacionado: El primer audio de "El podcast del microbio" está dedicado a Antonie van Leeuwenhoek
Esta entrada participa en el XVI carnaval de la Física, cuyo blog anfitrión es tecnoloxia.org.
Christina Karlsson Rosenthal (2009). The beginning Nature Millestone : 10.1038/ncb1938
Anton van Leeuwenhoek (1632-1723), fue el ujier del ayuntamiento (de Delft) que más aportó a la Ciencia.
ResponderEliminarSu hobby era pulir diminutas lentes perfectas. En 1665, fue el primero en ver capilares vivos; en 1674, los corpúsculos rojos que dan a la sangre su color; y en 1683, las bacterias.
A lo largo de vida fabricó un total de 419, y según Isaac Asimov, (estos datos provienen de su libro Momentos estelares de la Ciencia):
"Todos los descubrimientos de los grandes biólogos, desde 1700 en adelante, arrancan, de un modo u otro, de las diminutas lentes de vidrio pulidas con todo mimo por el ujier del ayuntamiento de Delft".
Hola Francisco
ResponderEliminarGracias por tu contribución. No había añadido a Leeuwenhoek porque merece su propia entrada. De hecho el primer audio de "El podcast del microbio se lo dediqué a él, (lo he añadido en la entrada). Además, la entrada va sobre microscopios compuestos y el de Leeuwenhoek era una lupa.
Unas pequeñas correcciones al libro de Asimov. Leeuwenhoek era un tratante de telas, no un sirviente público. Y su proceso de fabricación de lentes no era por pulido sino por fusión del vidrio, pero eso lo dejo para otra entrada en el blog.
Saludos